Asterix y Obelix no son nada sin su pócima

La verdad es que hay días que no estás ni para levantarte, pasan cosas o no pasan, da igual te afectan igualmente, y hoy es uno de esos días en que te sientes como Asterix y Obelix que temes que el cielo se caiga sobre ti, y como una instintiva avestruz escondes tu cabecita.
Pero como por suerte la vida no nos hace demasiado caso y va a su bola, te llama una amiga y te dice que ha salido tu última expo en un periódico y la artífice de la noticia te la envía por correo y ves que te han incluido en la cabecera de la sección de Cultura y Ocio del periódico de La Opinión.
 Esto te cambia un poco la perspectiva y das por buenas tantas horas de entrega, en este mundo creativo hay muchos y muy buenos artistas y por supuesto es harto difícil destacar, pero dejar aunque sea una miajita de lo que haces en la retina de alguien te hace ver el mundo de otra manera, incluso te das cuenta que Asterix y Obelix sin su pócima tampoco eran tan fuertes, o por lo menos no eran muy duchos en astronomía.