Las esperas pueden ser muy creativas

Estar esperando por fuera de la consulta del médico, suele ser muy aburrido, casi una tortura china y si encima se olvidan de tí en la lista, pasa toooodo el mundo delante tuyo y cuando por fín te atienden no encuentran tu historial, es muy surealista, pero también muy creativo.
El aburrimiento se puede canalizar, normalmente, cuando voy al médico me suelo llevar el último libro que este leyendo, en este caso El extranjero de Albert Camus, (A falta de otro enlace he de utilizar la Wikipedia) que sinceramente me tiene intrigada, o más habitualmente me llevo, mi libro de artista, mi lápices y me dejo llevar y al final surgen cosas interesantes que hacen más llevadera la espera.